CRÍTICA DE CINE

La Chica en la Niebla: Los malos y el miedo

Donato Carrisi debuta en la dirección con esta película que es la adaptación de su propia novela. El reparto del filme está formado por Toni Servillo (La gran belleza), Alessio Boni (The Tourist), Lorenzo Richelmy (Una questione privata) y Jean Reno (Escuadrón de élite).

Thriller | 128 min. | Italia | 2017

Título: La chica en la niebla.
Título original: La ragazza nella nebbia.
Director: Donato Carrisi.
Guión: Donato Carrisi.
Intérpretes: Toni Servillo, Jean Reno, Alessio Boni, Lorenzo Richelmy. 

Estreno en España: 25/05/2018 
Productora: Colorado Film Production

Distribuidora: DeaPlaneta.

 

Sinopsis

La cineasta Àgnes Varda y el fotógrafo JR recorren las calles de Francia en la furgoneta en la que trabaja el segundo, con el objetivo de conocer gente con la que intercambiar ideas y de paso fotografiar. De este modo, ambos artistas podrán desarrollar y ampliar su colección de imágenes y experiencias. JR y Varda coinciden con agricultores y una vendedora.

Crítica

Tras el éxito internacional de la novela “La ragazza nella nebbia” (dos millones y medio de ejemplares vendidos, traducción a 24 lenguas), su autor, el escritor y periodista italiano Donato Carrisi, decidió aptarla para el cine –medio en el que ya se había estrenado como guionista-  y ha debutado con ella como director de largometrajes, lo que le ha valido recibir el Premio David de Donatello (equivalente a nuestros Goya) al Mejor Realizador Novel 2018, que concede la Academia del cine italiano.

Thriller “a la italiana” –como hay un thriller escandinavo- en torno a la instrumentalización de una tragedia personal.

En el perdido pueblo de Avechot, en los Alpes, ha desaparecido la joven Anna Lou, de 16 años. Para indagar qué ha ocurrido llega el investigador Vogel, famoso por conseguir un gran eco mediático de los casos que averigua. De hecho, inmediatamente llegan a Avechot cámaras y periodistas que en sus informaciones prestan enorme interés a Loris Martini, profesor en el instituto local lleno de deudas, sobre el que recaen las principales sospechas. Pero la realidad se revelará más retorcida de lo que se pensaba. Un par de piruetas literarias sitúan en el punto de mira al propio investigador, Vogel, para volver a centrar la atención en el profesor.

El elenco actoral está encabezado por una serie de intérpretes contrastados de los que quitan el hipo: el gran Toni Servillo (La gran belleza, La Juventud), Alessio Boni (La mejor juventud), Lorenzo Richelmy (intérprete de la serie Marco Polo) y el francés Jean Reno (El profesional), este último un tanto desaprovechado en un rol que hubiera necesitado un poco más de interés por parte de los guionistas.

“No son los héroes quienes determinan el éxito de una obra, el mal es el auténtico motor de cualquier historia” dice el profesor de italiano Loris Martini a una clase  de adolescentes que esperan con impaciencia el sonido del timbre que anuncia el final de la hora.  Palabras que pueden resumir  el interés del Carrisi autor de novelas negras, al que le gusta definirse como un “incurable cobarde”, que sabe sacar provecho de las causas que provocan el miedo.  Para él, tanto en la literatura como en el cine, los buenos no ejercen ninguna fascinación mientras que los malos pueden tener mil caras diferentes.

Thriller “a la italiana” –como hay un thriller escandinavo- en torno a la instrumentalización de una tragedia personal, tanto por parte de quien investiga como de los medios que se hacen eco de ella. De eso sabemos largo por estos pagos.

Hay algo de vintage, de “Twen Peaks” y de “Fargo” en esta chica perdida en la niebla que con la noche cae sobre el pueblo. “No aparece una sola arma, no hay violencia, no hay cadáver. ¿Cómo se puede construir un thriller sin esos elementos” se pregunta Carrisi en una entrevista en el diario La Repubblica. Y se responde con lo que a primera vista puede parecer una salida por la tangente: “El sueño más hermoso es la risa de un niño, salvo si lo oyes de noche, estás solo en casa y no tienes hijos”. O sea, el miedo, eso es exactamente el miedo. El leit motiv de la obra de Carrisi, el cobarde incurable.

La Chica en la Niebla intriga desde el primer segundo y según se va desarrollando el filme, sorprende con sus giros de guion. Todo está calculado al milímetro con unos personajes muy bien perfilados.