CRÍTICA DE CINE

Encanto: Dale a tu cuerpo alegría madrigal

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Encanto

Cartelera España 26 de noviembre  

Título original

Encanto
Año
Duración
99 min.
País
 Estados Unidos
Dirección

Jared BushCharise Castro SmithByron Howard

Guion

Jared Bush, Charise Castro Smith. Historia: Jared Bush, Charise Castro Smith, ver 4 más

Música

Lin-Manuel Miranda, Germaine Franco

Fotografía

Animación, Alessandro Jacomini, Daniel Rice, Nathan Warner

Reparto
Animación
Productora

Walt Disney Animation Studios, Walt Disney Pictures. Distribuidora: Walt Disney Pictures

Género
AnimaciónAventurasComediaFantástico | FamiliaRealismo mágico
Grupos
Clásicos de Walt Disney
Sinopsis
Cuenta la historia de una familia extraordinaria, los Madrigal, que viven escondidos en las montañas de Colombia, en una casa mágica de un pueblo situado en un enclave maravilloso llamado Encanto. La magia de Encanto ha dotado a todos los niños de la familia de un don único, desde la súper fuerza hasta el poder de curar... pero se ha olvidado de una niña llamada Mirabel. Cuando Mirabel descubre que la magia que rodea Encanto está en peligro, decide que ella, la única Madrigal normal, podría ser la última esperanza de su extraordinaria familia.
 
CRÍTICA

Zootopia, Rompe Ralph, Frozen, Raya y el último dragón… En esta última década, la casa del ratón nos ha ido sirviendo de clásicos, unos más ingeniosos y creativos, otros más mágicos y fantasiosos u otros que “simplemente” buscan un digno entretenimiento para evadir nuestras ocupadas mentes. Pues bien, casi finalizando el 2021, Disney nos regala con Encanto una de sus más mágicas producciones de estos últimos años. Y es que lo tiene todo para serlo: una llamativa dulzura, unas canciones rítmicas a la par que estimulantes, una tierna emotividad susceptible al llanto –un servidor no necesito de kleenex, pero hay quien sí los tuvo que desplegar– y sobre todo una latente e inextinguible magia, mucha magia. Aunque esto implique adornarla de una inevitable y característica pomposidad.    

Todos nacemos con un don que vamos desarrollando mientras evolucionamos existencialmente, y no, no hace falta de superpoderes para adquirir uno –ya sea superfuerza, adoptar múltiples cuerpos o escuchar lo inaudible–; y es que la mejor cualidad se puede hallar en lo cotidiano, en el estar con los tuyos, arroparlos, defenderlos y protegerlos. El estar ahí cuando te necesitan y cuidar de tus seres queridos en los momentos más vulnerables es un don mucho más especial que cualquier superpoder que pueda existir. En Encanto se pone en valor la protección familiar, pese a que te aislen por no ser como ellos hubieran deseado, pero es que el amor siempre ha podido con la aversión y la malquerencia, como demuestra la más pequeña de las hermanas Madrigal en esta obra de búsqueda y salvación.

Nada más comenzar se nos presenta y define a los miembros de la familia Madrigal con musicalidad y no con diálogo, siendo este el principio de una irresistible eufonía prolongada a lo largo del espacio-tiempo de la cinta. Y es que Encanto se percibe como una bonita fábula musical; funciona mejor en el territorio melódico que en el ámbito dramático, aunque su mensaje cale hondo en el alma del espectador.

Hay musicales que aúnan canciones memorables con una historia sólida, penetrable y formidablemente hilvanada – la notable La La Land, la imponente Bailar en la Oscuridad o la majestuosa Mary Poppins serían ejemplos de ellos–, mientras que hay otros que dejan de lado la trascendencia y/o excelencia del guion para dar paso a la fanfarria más deleitable –claro ejemplo de ello lo tenemos en la icónica pero argumentalmente llana Mamma Mia!–. Y pese a que lo nuevo de Disney no sea un musical al uso, podemos catalogarla como una dulce y alegre armonía envuelta en un realismo mágico que no da con la tecla exacta en su estilo narrativo; podemos decir que la película sufre de un vaivén argumental.

Si bien con Coco, Pixar nos trasladaba a las tradiciones de México, esta vez a Walt Disney Pictures no le hace falta más que una casa agrietada y sus alrededores para transportarnos a la cultura colombiana, y es que como el país cafetero sea, como dice la canción, tan encantador –y acogedor– como este título, un servidor no tardará mucho en adentrarse a sus profundidades. Estamos ante una película que, aparte de resultar un homenaje a la Colombia rural, también es universal, trata temas como la presión familiar, que servirá para concienciar a los infantes de no autoexigirse y hacer lo que dicta su corazón.     

En definitiva, para el que escribe estas líneas, Encanto es un producto cimentado por una despampanante musicalidad, por una historia -tal vez algo cursi- donde la magia nunca se apaga y que, lejos de ser perfecta, cuenta con pocas grietas. El título es un spoiler, y es que estamos ante un encanto de película. Dan ganas de abrazarla. Querido lector, en estas fechas, dale a tu cuerpo alegría Madrigal.