De entrada vale la pena comentar que el título de esta alocada y divertida aventura nos puede inducir a error. PolloFrito no es solo el personaje protagonista de la historia sino que son dos distintos.
Para resolver el acertijo y conocer el rol que juega cada uno dentro de la peripecia deberéis acercaros a sus páginas (o simplemente mirar la contraportada, en la que también se resuleve el enigma) y disfrutar de la acción, que hay mucha y muy entretenida.
Hay que avisar a aquéllos que no estén muy avezados en la materia que existen bastantes diferencias entre los vídeos que suele colgar el autor de la historieta, un conocido youtuber mexicano con un porronazo de seguidores en su canal y el público al que va dirigido el libro que nos ocupa. Aquí podéis visitae su popular canal de youtube: https://www.youtube.com/@PolloFrito_.
En el caso de los vídeos colgados en los que se analizan de forma harto lenguaraz y socarrona aspectos que tienen que ver con el universo de este conocidísimo videojuego de construcción llamado Minecraft digamos que van dirigidos a un público adulto avezado en las intríngulis del “mundo abierto”, con chistes bastantes brutos y un ritmo alocado donde puedes hallar desde trucos que te harán ir superando fases o advertencias de lo peor que te puede pasar al unirte al grupo de constructores y destructores de bloques.
No ocurre lo mismo con el debut en la obra publicada del mismo autor de los citados vídeos de youtube. En PolloFrito y el ladrón de esmeraldas todo es más accesible y menos vitriólico, lo que la convierte en una lectura harto recomendable para los más y los menos pequeños.
Sus más de ciento cincuenta páginas se leen de corrido gracias a una narración agil donde en todo momento están sucediendo cosas. En ese aspecto se nota la vertiente de jugador de videojuegos del autor, ya que la trama se enriquece de un constante ir y venir de los protagonistas que deben ir superando obstáculos en su camino para desenmascarar a un ladrón que les está haciendo la vida imposible, ya que les ha pasado el muerto de sus fechoría y deben demostrar su inocencia ante un pueblo llano ávido de escarmentar a los malhechores.
Le estructura del libro es atrayente dado su colorismo y la proliferación de interjecciones, interrogaciones y exclamaciones, y es en ese uso (que no abuso) de esas oraciones admirativas donde se vierte toda la ironía, intensidad y emoción que ilustra todo el relato.
El lenguaje es claro y sencillo, aunque dado que el debutante es mexicano se cuelan algunas palabras y expresiones que para el lector español pueden resultar algo complicadas de entender.
Y hablando de ilustraciones, el encargado de ir intercalando dibujos entre las distintas aventuras es también un dibujante mexicano, concretamente de Oaxaca, llamado Betosaurio (Su nombre real es Alberto Inocente).
Su trabajo empieza a ser bastante reconocido dentro del mundillo editorial y por ejemplo podemos disfrutar de su obra en las portadas e interiores de libros infantiles y juveniles tan populares como los de la saga Game Arta.
Si queréis conocer más sobre su proceso creativo podéis echar un vistazo a estos vídeos bastante ilustrativos (valga la redundancia): https://www.youtube.com/@betosaurio4168
En definitiva, estamos ante el primer libro de lo que esperamos sea una colección más longeva, una serie de andanzas tan graciosas como amenas plagadas eso sí, de trampas y situaciones rocambolescas donde no todo puede llegar a ser como parece.
Aquí puedes leer un fragmento: https://www.penguinlibros.com/es/libros-infantiles-a-partir-de-7-anos/314746-libro-pollofrito-y-el-ladron-de-esmeraldas-9788419421562/fragmento
